Hoy con motivo de la conmemoración del Día Mundial de la Radiología, presentamos la descripción y aplicación de un estudio que cumple un papel fundamental en el diagnóstico y seguimiento de la salud del hombre: el ultrasonido de próstata.
El ultrasonido es un examen altamente utilizado para la evaluación de la próstata.
Facilita el diagnóstico del cáncer de próstata y constituye una herramienta indispensable para realizar una biopsia.
Existen varias técnicas del ultrasonido que proporcionan un gran avance en la obtención de imágenes médicas de la glándula prostática.
Gracias a las imágenes obtenidas es posible realizar dos análisis :
Un análisis estructural de las diferentes partes que constituyen el área prostática.
A partir de los patrones registrados es posible medir el volumen de la próstata, estudiar la ecogenicidad (homogénea, heterogénea), determinar la rigidez o elasticidad del tejido.
Un análisis funcional de la macrovascularidad y micro vascularidad. Éstos son parámetros clave para estimar el aporte de sangre y la oxigenación de los tejidos.
Anatomía de la próstata
La glándula prostática está entre el cuello de la vejiga y el diafragma urogenital, justo por delante del recto.
Por esta razón, la posición ideal para obtener imágenes es mediante un ultrasonido transrectal.
Esta glándula tiene como función principal producir y secretar un líquido alcalino que se encarga de proteger y transportar a los espermatozoides durante la eyaculación.
Por lo general, la próstata cambia y se agranda con la edad. Su tamaño normal tiene como medidas 3*3*5 centímetros aproximadamente. Su volumen es de 25 milímetros.
Por tal razón, es importante revisar ese proceso natural pues pueden presentarse inflamaciones y enfermedades.
La prostatitis, la hiperplasia prostática benigna (HPB) y el cáncer de próstata (CaP) son los padecimientos más comunes.
El cáncer de próstata es la neoplasia (formación patológica de un tejido) maligna más común en los hombres.
Tipos de ultrasonido para el análisis de la próstata
Ultrasonido transrectal en escala de grises
Esta técnica fue introducida en 1968 y desde entonces ha sido de gran ayuda como guía en las biopsias de próstata.
La ventajas del ultrasonido transrectal son los bajos costos, la mejor posición del paciente y la facilidad para visualizar la próstata en tiempo real.
Ultrasonido transrectal con Doppler con color
Con este tipo de examen se busca ilustrar la macrovascularidad de la región.
El cáncer de próstata (CaP) tiene una densidad aumentada de microvasos en comparación con el tejido sano.
Por lo tanto, a través de las imágenes a color se visualiza el flujo de sangre lo que ayuda a detectar y localizar el cáncer.
Ultrasonido transrectal con Doppler con contraste
El ultrasonido con contraste se puede utilizar para evaluar la micro y macro vascularidad.
Se administra por vía intravenosa microburbujas cubiertas con una capa de lípidos.
Estas microburbujas sirven para potenciar las ondas del ultrasonido, lo que permite visualizar el flujo sanguíneo de los microvasos.
Sonoelastografía en tiempo real
Es una técnica recientemente utilizada la cual permite ilustrar y visualizar la elasticidad o rigidez del tejido en ciertos cortes del ultrasonido.
Esta técnica permite obtener resultados a través del postprocesamiento de las imágenes y no requiere contraste.
Las imágenes pueden obtenerse a color o en escala de grises.
De acuerdo con lo anterior, cada técnica ofrece una alternativa para el diagnóstico de patologías, sin embargo, la biopsia guiada por ultrasonido transrectal sigue siendo el método más recomendado para la detección del cáncer de próstata.
Si hay antecedentes familiares de este tipo de cáncer y tienes 45 años, es importante empezar con este chequeo.
Si no hay antecedentes familiares, se recomienda que al cumplir 50 años inicies la revisión anual de la próstata.
Recuerda consultar previamente con tu urólogo en caso de presentar síntomas urinarios.
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